Alas del Tiempo

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Nombre: Nekhbet

miércoles, marzo 23, 2005

Strawberry Birthday



Perdonen que no escriba mucho, pero aquí dejo las fotos que he subido hasta ahora.... besos!!

http://es.pg.photos.yahoo.com/ph/nekhbet13/album?.dir=5986

http://es.pg.photos.yahoo.com/ph/invergreca/album?.dir=/68c7

martes, marzo 22, 2005

Domingo de Ramos



Eran las 06:30 de la mañana, en el cielo estaban brillando las primeras luces del último día de invierno, algo no estaba bien, el día estaba nublado se podían apreciar en las montañas la neblina que arropaba todo el paisaje, hasta la naturaleza estaba triste.. no quería llorar, no quería ni siquiera pensar, intenté dormirme todo el camino, pero me fue imposible.. Cuántas veces había tomado ese camino contigo? no lo recuerdo, pero sé que muchas, siempre me recostaba en tu regazo y me pasabas la mano en el pelo hasta que me durmiera.

Ibamos todos callados, nadie dijo nada en todo el camino, o al menos yo no recuerdo que alguien dijera nada hasta que paramos a desayunar, sabes dónde, no? donde siempre parabas tú a comprarnos las canquiñas que tanto nos gustaban aunque sabíamos que no las podíamos comer.

Llegamos a tu casa alrededor de las 10:00 de la mañana, aún seguía totalmente nublado y hacía un calor agobiante, me desmonté del coche y cuando iba a entrar a la casa te ví de lejos y no pude, no pude hacerlo, me quedé en la acera y ahí ví a José Miguel, sabes? Teníamos 10 años que no lo veíamos y no pudimos decirnos nada más, solo nos abrazamos un buen rato y sentí como las primeras lágrimas corrieron por mis mejillas, también vi a otras personas que me saludaron pero yo no tenía la cabeza como para recordar ahora quienes eran. Tomé mis cosas y di la vuelta para entrar por la capilla, entré a la casa y ahí vi a Tía Eridania y Tía Marieta a la que tenía tantos años que no veía, nos abrazamos un buen rato y me dijeron que mi madre me estaba esperando fuera, pero yo no tenía aún la suficiente entereza para enfrentarme a mi madre, así que me cambié de ropa y fui al patio, estaba todo como lo habías dejado, tus árboles que con tanto cariño regabas todas las mañanas y de los que tanto nos regañaste por subirnos en ellos.. que extraña me sentía en esa casa, era tan pero tan raro estar ahí y no escucharte cantar en la cocina mientras nos preparabas el desayuno, ese chocolate con leche que solías hacernos luego de regresar de misa, ayy!! cuanto me costaba levantarme para ir a esa primera misa de los domingos, lo recuerdas?, siempre me abrigabas bien y salíamos tomadas de las manos a la primera hora del alba, aunque sabías que iba a dormirme a mitad de la misa, aún así me obligabas a ir.

Reuní todo el valor que me quedaba y fui en búsqueda de mi madre, se quebró al verme, nos abrazamos fuertemente llorando las dos, fue muy difícil para mí verla en esas condiciones a sabiendas de que es una persona de tanta entereza y verla así me partió el alma, y entonces ahí te ví tan en paz, tan tranquilita, mami me dijo que me acercara a saludarte, pero no quería que me vieras llorar, nunca te gustó verme llorar, más bien te preocupabas mucho, porque sabías que me faltaba el aire y me ahogaba cuando lo hacía.

Empezaron a llegar muchas más personas, todos los niños, jóvenes y adultos que fueron tus alumnos de catequesis, tus compañeras del Sagrado Corazón, mis primos, mis tíos, más familiares y gente del pueblo, la casa estaba llena de personas, casi no se podía ni caminar, tantas personas, tantas voces pero ninguna era la tuya.

Caminé un rato por la casa, creo que los momentos más felices que recuerdo de mi infancia fueron en tu casa, cuando todas las navidades nos íbamos de vacaciones para allá y nos reuníamos todos, bueno en ese entonces éramos solo la mitad que ahora pero nunca faltaba nadie, tremendo dolor de cabeza que te dábamos todos revoloteando por la casa, pero eso te ponía feliz.

Al fin pude ir a saludarte, estabas preciosa ahí tan en paz, estuve ahí un buen rato acariciando tu pelo, pareciera como si en cualquier momento abrirías los ojos y me dirías como siempre “Sahyrita mi muñequita, bésale la mano a tu nenena”, y me darías tu bendición con un beso en la frente, recordé aquello que tantas veces me pediste que hiciera y te prometo que te cumpliré, no se me ha olvidado y siempre lo tengo presente.

Más tarde llegó el Obispo a darte el adiós, habló de tu servicio en la iglesia, de tus años como misionera, de a tantas personas que serviste y les diste amor y reconfortaste en los momentos que más lo necesitaban, recordé aquella vez que estuve enferma y tuvieron que ingresarme, creo que debía de tener unos 10 años, cuando ya estaba mejor me obligaste a pararme e ir a visitar a los enfermos de las habitaciones continuas, a darles unas palabras de aliento, recuerdo que se me hacía difícil caminar porque llevaba el suero puesto, así eras, esa es la persona que eras, siempre dando tanto, siempre tan servicial y cariñosa.

Y llegó la hora de despedirnos, fuimos uno a uno a decirte adiós, recuerdo que me quedé un rato mirándote y acariciándote el pelo, como solías hacerlo conmigo, te di un beso en la frente y te dejé una rosa roja en las manos, cuando ya todos pasaron a verte, vinieron unos hombres a buscarte, nos fuimos todos detrás de ti caminando, primero iban las compañeras del Sagrado Corazón entonando cánticos pero con una voz menos, luego íbamos tus hijos y nietos y al final iba todo el resto del pueblo; las calles estaban totalmente vacías y en silencio, aún seguía nublado pero no cayó ni una sola gota de agua, solo se escuchaba el coro y nuestros pasos.

Llegamos al lugar donde te dejaríamos, nos despedimos una vez más y ahí te dejamos feliz y satisfecha de haber cumplido tu labor, de habernos dado lo mejor de ti, tus enseñanzas y todo tu amor y cariño, así que quédate tranquilita que tu trabajo no fue en vano, nunca olvidaremos tus consejos, como nos encaminaste a todos por la vida y como nos enseñaste a ser mejores personas.

Te queremos mucho nenena, tu nieta que no te olvida y te adora,

Sahy.

P.D. Extrañamente el cielo ha estado totalmente despejado, Dios debe estar feliz de que le hemos devuelto un angel al cielo.

lunes, marzo 14, 2005

Un adiós?


Primeramente y ante que todo, perdonen a los que han entrado al blog y han leido este post incompleto pero es que, no sabía por donde empezar esta montaña rusa de sensaciones y sentimientos que he experimentando últimamente, no he estado en mis mejores días y no quería que esa sensación de malestar se reflejara en mis escritos, pero ya tenía que venir a desahogarme. El trabajo me está ahogando y envolviendo, he estado sometida bajo un stress terrible las últimas semanas, que espero que ya acabe pronto. Una de als razones para ese estado de stress fue el cumpleaños de mi Aly, ufff... quedó precioso pero vamos!! no estoy hecha para lidiar con niños, eso lo sabe todo el mundo, no tengo paciencia, NI UNA PIZCA, no sé como salieron todos sanos y salvos sin que yo asesinara a uno jajaja es broma.... por fin ya ha acabo y hasta el proximo año!!...
La peor noticia ha sido hoy... a las 9 de la mañana, suena mi móvil, mi madre.... me dice... que va camino al interior del país a ver a mi abuela... le pregunto que pasa... y nada... silencio al otro lado de la línea, repito la pregunta y me dice entre sollozos que mi abuela está agonizando y no creen que llegue al lunes viva, ya le han dado los santos óleos, y los médicos dicen que ya no hay nada más que hacer....
Ahora entenderán porque no había tenido deseos de escribir algo o haber terminado este post...
Hasta la próxima chicos, besos a todos.